La organización Human Rights Watch (HRW) ha instado este jueves a investigar posibles crímenes de guerra perpetrados por el Ejército Nacional Sirio (ENS), una coalición de grupos rebeldes en el norte de Siria que cuenta con el apoyo de Turquía.
La ONG ha denunciado ataques deliberados contra civiles y objetivos humanitarios, incluyendo un ataque con drones contra una ambulancia de la Media Luna Roja Kurda que transportaba heridos, causando la muerte de al menos seis personas.
La investigadora de HRW para Oriente Próximo y el norte de África, Hiba Zayadín, ha alertado sobre un "patrón claro y preocupante de ataques ilegales contra civiles y objetivos humanitarios" por parte del ENS y Turquía. "Turquía, como principal respaldo del ENS, tiene la obligación de frenar estos abusos y evitar convertirse en cómplice de crímenes de guerra", ha afirmado.
Uno de los ataques más graves denunciados por HRW es el que impactó contra una ambulancia en una carretera mientras transportaba civiles heridos. "Atacar un vehículo sanitario claramente identificado es un crimen de guerra por el que las fuerzas proturcas deberían rendir cuentas", ha enfatizado la organización.
HRW también ha denunciado la ofensiva del ENS contra la presa de Tishrin, en la provincia de Alepo, una infraestructura de importancia estratégica. Al menos cuatro ataques desde enero han golpeado la zona, dejando 20 muertos y 120 heridos, según las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una alianza liderada por la milicia kurda Unidades de Protección Popular (YPG), respaldada por el gobierno central de Siria, junto a occidente.
Varios testigos han descrito un "escenario desolador" en los alrededores de la presa, con bombardeos indiscriminados que han dificultado la evacuación y protección de la población civil. HRW ha recordado que, según el Derecho Internacional, las partes en conflicto deben garantizar la seguridad de infraestructuras esenciales como hospitales y presas.
El Comité Internacional de la Cruz Roja ha advertido que un daño estructural grave en la presa de Tishrin podría provocar una catástrofe humanitaria con consecuencias devastadoras.
HRW también ha acusado al ENS, junto con las Fuerzas Armadas de Turquía y sus agencias de inteligencia, de cometer violaciones graves de los Derechos Humanos. Según la ONG, estas fuerzas han llevado a cabo secuestros, detenciones arbitrarias, torturas, violencia sexual, saqueos y extorsiones, incluso contra menores de edad.
"El Derecho Internacional requiere que las partes enfrentadas en un conflicto presten atención a los heridos y enfermos. Las ambulancias y los hospitales deben contar con una protección especial y no deben ser objeto alguno de los ataques", ha recalcado HRW, que ha instado a la comunidad internacional a presionar a Turquía para que garantice el respeto a los derechos humanos en las zonas bajo su influencia.
La organización ha exigido que los responsables de estos crímenes sean llevados ante la justicia y que se garantice la seguridad de los civiles atrapados en el conflicto.
Álvaro Martínez, El Camarada del Mundo®, 31/01/2025.
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