Las tres puertas

Publicado el 5 de marzo de 2025, 9:23

Me he dado cuenta de mi previo error, al interpretar la plenitud como un cierto “retroceso natural” a partir de donde me encuentro. Porque me es imposible alterar la naturaleza de ninguna de mis dos fuerzas... la luz se impone y domina, y la "oscuridad" la sigue pasivamente; no puedo pretender cambiar sus papeles. Además de que el tercer nivel, ha de representar la superación de los dos previos, lo cual quiere decir que debe ser parecido a su antecesora voluntad luminosa.


Encuentro sentido en una analogía que he ideado: tres fases para una puerta; al primer intento de apertura se rompe, y en la segunda se reconstruye de nuevo, en la tercera fase (dado que la puerta es ya tan rígida que no se puede romper) se abre cumpliendo adecuadamente su función. De la misma manera, cuando una persona se abre o conecta espiritualmente con el Universo, su identidad o “yo” no lo soporta y se desborda, fundiéndose con la Consciencia Divina (puerta rota); pero si decide proseguir su camino, sí o sí va a tener que re-identificarse con su consciencia terrena (y este es el período en el que puede descubrir su propio espíritu y fuente de su identidad, puerta reconstruida). Finalmente, cuando descubre que esa tampoco era la meta, comienza a encontrar su verdadero propósito al conectarse de nuevo a su Vida, pero valiéndose de su identidad o espíritu personal en lugar de descartarlo.

Se trata, en última instancia, de una conexión consciente y adecuada con la vida… lo denomino también como “voluntad de amor” o “expresión”; y básicamente significa: ser el realizador o manifestador, para los deseos y anhelos que guarda tu corazón.`Esto es la “expresión” o apertura por medio de la voluntad. Si la conexión es inconsciente (como en la primera fase o estado que mencionaba), resulta también un tanto caótica o deconstructiva; pero es el elemento voluntarioso lo que la encauza, dotándola de sentido, brindándole un orden distintivo. Pienso también, que esta tercera actitud, en pos de alcanzar el estado de plenitud, debe ser naturalmente gradual; ya que en el mismo instante en que te adelantas o retrasas a tu situación actual, la estás evadiendo en lugar de transformarla.

 

Meru, El Camarada del Mundo®, 05/03/2025.

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